La carrera Behobia-San Sebastián, una de las más clásicas del calendario de carreras español, tiene una misión: alcanzar la paridad en el número de inscripciones femeninas y así aumentar el número de mujeres en las carreras. Para ello, se ha comprometido a un ambicioso plan que le llevará a conseguir, para 2025, una cuota del 50/50 en cuanto al reparto hombres/mujeres en la carrera.
El objetivo de los organizadores de la carrera surge de una pregunta muy sencilla, que se plantean en su propia web: “¿Por qué tenemos un 44% de participación de chicas en la Behobia Txiki y un 48% en la Behobia Gaztea y sólo un 24% en la de adultos?” Y una posible explicación: “Hay muchos estudios que indican que las chicas entre 12 y 14 años dejan de hacer deporte de forma masiva.“ Los datos que hablan de la evolución de la participación femenina en carrera populares en España parece que juegan a su favor, pero no lo tendrá fácil. En España, ninguna carrera de más de 10.000 kilómetros se ha acercado a la completa paridad.
¿Se puede conseguir? Nosotros creemos que sí. Por ejemplo, países con mayor tradición en carreras populares como Estados Unidos están a punto de conseguirlo para la distancia del maratón, mientras que en medias maratones están en cifras del 60% según algunos informes. Así pues, tenemos datos para ser optimistas y pensar que sí se va a conseguir.
¿Por qué tenemos un 44% de participación de chicas en la Behobia Txiki y un 48% en la Behobia Gaztea y sólo un 24% en la de adultos?
Según el VI Estudio CinfaSalud: “Percepción y hábitos de los corredores y corredoras españoles”, actualmente en España un tercio de las personas que practican running de manera habitual son mujeres. Si a ello le añadimos que las mujeres, actualmente, están menos interesadas en las distancias largas, vemos que aún hay camino por recorrer. Iniciativas como la 50/50/25 de la Behobia-San Sebastián no pueden ser más que aplaudidas porque sin duda repercutirán a que más mujeres adquieran hábitos de vida deportivos, lo que sin duda es positivo para la sociedad. Tampoco hay que dejar de lado el mensaje de igualdad de género, tan necesario (por desgracia, todavía) estos días.
¿Cómo conseguir más inscripciones de mujeres en las carreras?
Evidentemente, cuando se lucha contra la estadística, la costumbre y un poquito contra la forma de ser de los españoles y españolas, los frentes sobre los que actuar son muy diferentes. Es decir, no basta con levantarse un día y pensar que vas a cambiar el mundo sólo porque se te ha ocurrido. Para conseguir que el número de mujeres que participan en la Behobia-San Sebastián aumente, hay que mover muchos hilos y conseguir muchas “pequeñas victorias”. Pero el primer paso ya está dado. Y no es de hoy: los organizadores de la carrera llevan ya años hablando de este tema con instituciones y universidades, de forma que el tema está analizado convenientemente antes de lanzarse a por él.
Una de las primeras medidas será que en la edición de 2018 esté presente Kathrine Switzer, famosa con su dorsal 261 por ser la primera mujer en completar un maratón de forma “oficial”, y que dio lugar a una de las imágenes más icónicas del running femenino, siendo hostigada por participantes y espectadores masculinos para que abandonase. Esta iniciativa lleva gestándose desde 2015 y se materializa ahora, lo que sin duda dará un plus a la promoción de la carrera.
- Comunicación. Este es uno de los primeros puntos que debe cuidar la Behobia-San Sebastián. Hablar en voz alta y poner en el escaparate a la participación femenina. La comunicación es parte muy importante de cómo se percibe a una carrera. De la misma manera que existen carreras que todos sabemos que están destinadas a la mujer o que fomentan la participación femenina, la Behobia-San Sebastián debe decir bien claro: “mujeres, bienvenidas”.
- Cuidar el lenguaje. No sólo se trata de hablar a las mujeres, sino que se preste especial atención a que el lenguaje usado, tanto escrito como en imágenes, sea inclusivo y no discriminatorio. Por ejemplo, en las comunicaciones oficiales se hablará siempre de “feria de la carrera” y no “feria del corredor”. Podemos hablar acerca de la corrección gramatical y de si la palabra “corredor” sirve como genérico y engloba a corredores y corredoras, pero el efecto del cambio es más importante por su intención que por la corrección lingüística.
- Presencia de las mujeres en la organización. Por supuesto, hay que dar ejemplo. Por ello, el C.D. Fortuna ha decidido ampliar el número de liebres femeninas, pasando a ser 11 de las 29 disponibles. También se prestará atención a los grupos de entrenamiento para mujeres, de los diferentes que ofrece la organización para todos los inscritos. Esta última iniciativa no es nueva, ya que desde hace 10 años el proyecto «Heuk Proba Ezan» ha conseguido hacer pasar del 14 al 24% de mujeres en la carrera.
- Trabajar con la sociedad. Un objetivo como este no se puede conseguir de la noche a la mañana, sino que es necesario que la organización se meta más a fondo en la cuestión y apoye iniciativas e investigación sobre el tema, para conocer las causas y las motivaciones que harán que más mujeres decidan apuntarse a la carrera. Por ello, han estrechado su colaboración con la Universidad de Deusto. Esperemos ver los resultados de esta colaboración en los próximos años.
Entre las medidas que han tomado por el momento, parece que hay una cosa que la organización tiene clara y que creemos que es de aplaudir. Podría haber caído en el recurso fácil de dar ventajas en la inscripción o servicios adicionales para mujeres (cajones especiales, por ejemplo). Pero, de esta manera, estaría dando un sentido muy comercial a la iniciativa.
Lo que se pretende no es que haya más mujeres corriendo esta carrera, sino más mujeres corriendo en las calles todos los días. Este es, sin duda, el camino.
Por qué debemos aplaudir (y apoyar) iniciativas como la 50/50/25
De objetivos ambiciosos han surgido grandes logros. Será una carrera difícil, pero seguro que gracias a ello vemos resultados positivos en toda la sociedad. Las carreras populares hoy en día, en un mundo tan global y con tantos intereses comerciales, no deben olvidar el papel que juegan en cuanto a impulsoras de estilos de vida sana. Incluir un mensaje de igualdad y de inclusión solo puede aportar cosas buenas a la sociedad.
El hecho de prescindir de una estrategia comercial centrada en la mujer o con el apoyo de marcas dirigidas a las corredoras, parece indicar que la Behobia-San Sebastián no pretende (solamente) ganar más público potencial en el mercado femenino, sino convertirse en un motor de cambio, del que el ganador es la sociedad en su conjunto.
Por último, a efectos de posicionamiento de la carrera, no podemos negar que se trata de una iniciativa que refuerza los lazos de la Behobia-San Sebastián con la sociedad, y la sitúa en un territorio emocional que puede repercutir muy positivamente en su imagen. Desde un punto de vista de marketing es, también, un buen movimiento.
¡Muchos éxitos, Behobia-San Sebastián!